Cada ocasión en la que veamos una persona pidiendo limosna, utilizando un niño dormido a la intemperie, un menor de edad obligado a trabajar, deberíamos denunciarlo y evitar alimentar el problema con alguna moneda.
"El país se divide entre los que hacen y los que critican a los que hacen". (Gloria Zea)
domingo, 12 de junio de 2016
Cómplices del trabajo infantil
Cada ocasión en la que veamos una persona pidiendo limosna, utilizando un niño dormido a la intemperie, un menor de edad obligado a trabajar, deberíamos denunciarlo y evitar alimentar el problema con alguna moneda.
Lección aprendida. Colombia perdió 3 a 2 ante Costa Rica.
Aun con todos los cambios, la confianza de la afición en su selección permaneció, uno por el deseo de triunfar y otro por que se entendía que si fueron convocados a la selección, en cualquier momento podían jugar.
Las consecuencias de la decisión técnica aparecieron desde el primer minuto: algo de nerviosismo, posiblemente porque son jugadores muy jóvenes (son de la selección olímpica 2016), y tal vez un compromiso superior al mismo deseo de jugar. Al frente jugadores de experiencia: aun cuando era su último partido en la Copa América Centenario, lo enfrentaba con la misma seriedad que el amistoso más fácil. Resultado; no se habían jugado dos minutos y ya Costa Rica ganaba.
Para los que más saben de fútbol, lo que estaba pasando no era sorpresivo, ya Colombia había mostrado debilidades, ganando con los titulares.
Los jugadores trataron de sobreponerse consiguiendo un empate provisional, pero los problemas no se solucionaron, al equipo le faltaba un conductor, a los delanteros no les llegaban balones, dábamos ventaja en defensa, en la mitad; en otras palabras en ningún sector del campo se podía encontrar claridad. Los costarricenses conscientes de nuestra situación aumentaron la ventaja, dos goles más, ya el tema era un poco humillante.
Pasado el chaparrón de la primera parte, el director técnico Pekerman debía enmendar el error, ingresó a James Rodríguez y Edwin Cardona, sin embargo la situación no parecía cambiar, el problema era mayor; un cambio más, entró Juan Guillermo Cuadrado, y por esa vía se consiguió mejorar, al final insuficiente, los tres cambios sirvieron para hacer un gol más y que el equipo saliera cabizbajo.
Obviamente las preguntas surgieron: menospreciamos al rival?, creímos que con nombre les ganábamos?, la juventud y la renovación sería capaz triunfar independiente de quien estuviera al frente?
Creo que todos coinciden en que dábamos por descontado que un rival eliminado podría ser derrotado de cualquier manera, la realidad fue otra, como de inmediato apareció en el campo, realidad que nos hizo evocar el recuerdo de lo sucedido en Londrina, "solo un desastre nos podía sacar de la olimpiada y pasó, por fortuna anoche ya estábamos clasificados, eso sí regalamos el primer puesto.
Después si lo que se quería era probar todo un equipo, ese no era el momento ni el lugar, los campos de entrenamiento y los amistosos resultan mejor y se exponen menos a la crítica.
La afición tampoco se puede decir tan radical diciendo que los jugadores fueron inferiores a la confianza; si están ahí es porque los juzgamos los mejores en sus posiciones, pero los once que salieron anoche están en etapa de acoplamiento a una estructura; eso fue lo que mostraron.
Como lección y sin olvidar otras, debe tenerse en cuenta la tan trillada expresión de los jugadores, "no hemos ganado nada, vamos a respetar al rival", y a partir de esa misma expresión agregar que la afición también merece respeto.
viernes, 3 de junio de 2016
Colombia con pie derecho en la Copa Centenario, dos a cero sobre USA
viernes, 8 de enero de 2016
Fin del conflicto con las Farc, el mejor deseo en 2016 para los Colombianos.
Llevamos casi un tercio del primer mes de 2016, nos hemos deseado éxitos en cuanto proyecto emprendamos, pero no leí en ningún mensaje que expresara un deseo por una paz del colectivo de colombianos. ¿Será porque estamos muy seguros de conseguir la terminación del conflicto con las FARC o porque el escepticismo no permite siquiera hacer una conjetura?
sábado, 24 de octubre de 2015
Elección 2015 por el futuro de una Bogotá mejor
El nuevo mandatario tendrá el reto enfrentar muchos más asuntos identificados como problemáticas actuales, otros más para evitar que las situaciones se repitan o prever la aparición de nuevos.
Finalmente después de las 4 pm del domingo 25 sabremos cuál encuesta tenía razón, quién asumirá la responsabilidad para la posición a la que haya puesto a consideración su nombre, la felicidad embargará no solo al elegido sino a sus seguidores, los demás con las caras largas y las fiestas canceladas, tendrán que esperar otro periodo para volver a someter sus nombres.
domingo, 4 de octubre de 2015
Fiestas religiosas entre la devoción y el ruido
Señor de la Columna - Tunja |
Colombia tiene una arraigada tradición cristiana. Las festividades religiosas, llenas de procesiones, pólvora y, en muchos casos, bandas marciales, son una constante. Al final, algunos fortalecen su fe, pero otros se ven afectados en sus oídos. Tunja, la capital de Boyacá, sobresale por su fervor religioso, especialmente en Semana Santa, cuando la devoción se enfoca en santos como la Virgen del Carmen, del Topo y el Señor de la Columna. Los creyentes, ataviados para la ocasión, siguen al cura en las procesiones. Sin embargo, estas plegarias suelen interrumpirse por estruendos que, aunque anuncian la festividad, desconciertan a la población: son los voladores, llamativos pero perturbadores. Esta amalgama de festividad y fe es parte intrínseca de la tradición católica de los boyacenses. Esta escena se replica en múltiples municipios. No obstante, quienes no disfrutan estos festejos suelen ser los visitantes de la ciudad, perturbados por la pirotecnia hasta altas horas de la noche. Lo mismo sucede con pacientes hospitalizados, para quienes el ruido puede ser insoportable. Incluso los residentes o visitantes ocasionales pueden no apreciar estos sonidos. Además, a las cinco de la mañana, los organizadores retoman su algarabía con una alborada: más pólvora y repiques de campanas, interrumpiendo el sueño de quienes anhelan descansar en un domingo al amanecer. Respetando las tradiciones y creencias locales, se debería considerar medidas para mejorar la experiencia de los visitantes, residentes temporales, pacientes, adultos mayores y niños sensibles al ruido. Una solución podría ser regular el uso de pólvora en horarios específicos. En este periodo electoral, donde los candidatos buscan mejorar la calidad de vida, se podría buscar un equilibrio sin menoscabar la fe de los lugareños. Las autoridades municipales deben tomar acciones, y entidades como la Defensoría del Pueblo y la Personería Municipal podrían implementar medidas para reducir la contaminación acústica. En otros países, ya se han establecido regulaciones similares, lo que podría aliviar la vida de aquellos afectados por la pirotecnia y la música a gran volumen en festividades.
sábado, 8 de agosto de 2015
Boyacá es una maravilla en Bogotá
Banda Sinfónica Colegio Boyacá - Tunja |
Artesano tejiendo futuro |
Nairo Quinta - Ciclista boyacense |
viernes, 26 de junio de 2015
Pese a la gran noche de David Ospina, Argentina eliminó a Colombia por penalties
domingo, 21 de junio de 2015
El triunfo de Brasil clasificó a Colombia a cuartos de final de Copa América
miércoles, 17 de junio de 2015
Colombia cobró revancha, venció con verraquera a Brasil
La ilusión de un país |
Final del partido y la alegría colombiana vuelve, los pitos suenan en la calle, las bubuselas y cuanto cosa haga ruido. Felicitación para Carlos Sánchez.
Una vez pitado el final del partido, Neymar como en casi todo el juego fue el lunar del partido, agredió a Bacca. y ll juez le mostró la roja a ambos.
domingo, 14 de junio de 2015
Venezuela apaga la ilusión colombiana en la Copa América 2015
Un año después del excelente desempeño de la Selección Colombia en el Mundial de Brasil 2014, y las dudas generadas por el "fair play" mostrado por FIFA - la del Sr. Blatter -, y destapado por la justicia de Estados Unidos en 2015. Una retocada selección Colombia inició una nueva aventura futbolística, esta vez con Falcao. El torneo; la Copa América 2015, el país organizador; Chile.
Como lo esperaba Colombia, los venezolanos salieron con un equipo muy junto, esperando en propio campo, impidiendo que el equipo colombiano encontrara, primero los espacios y después la claridad para llegar al arco de Baroja.
La estrategia venezolana estuvo acompañada del juego fuerte, que impidió la continuidad del partido, varias tarjetas amarillas fueron el merecimiento a este tipo de juego.
Venezuela esperó y contragolpeó, jugando también al error colombiano en defensa. La sorpresa para Colombia llegó a los 60 minutos, Rondón - como en la eliminatoria al mundial - marcó de cabeza, la asistencia fue de Guerra, el meta colombiano estaba más hacia el lado contrario por lo que no alcanzó a controlar. El silencio apareció no solo en el estadio sino frente a los televisores de la afición colombiana.
Más temprano (26 y 42 min.) ya Venezuela había avisado, en ambas ocasiones, Ospina demostraba porque es el arquero que es en Inglaterra.
A partir del gol, Colombia lo intentó, no solo abriendo el campo, sino buscando alternativas con el ingreso de Cardona, Teo y Martinez.
domingo, 3 de mayo de 2015
Ciclistas al garete
Últimamente, se ha impulsado con fuerza el uso de la bicicleta como medio de transporte en las ciudades. Se argumentan razones ambientales, beneficios para la salud y la reducción de costos en el transporte.
En poblaciones pequeñas, no hace falta fomentar su uso; es común ver al campesino, al estudiante y al empleado desplazarse en bicicleta. En las ciudades más densamente pobladas, muchos ya la emplean como herramienta de trabajo: mensajeros, repartidores y otros para realizar domicilios. Un gran grupo la utiliza como medio de recreación los domingos y festivos en la ciclovía, mientras que otros participan en competiciones que nos hacen sentir orgullosos en el mundo del ciclismo.
En general, los ciudadanos aceptan la bicicleta como medio de transporte, excepto quizás por la insuficiente infraestructura de las ciclorrutas y el deplorable estado de las vías, que ponen en riesgo no solo a los ciclistas, sino también a los conductores y peatones.
Sin embargo, lo que muchos ciudadanos no toleran es el comportamiento de algunos ciclistas: no respetan los semáforos, evitan las ciclovías, transitan montados en puentes peatonales, exponiendo a quienes caminan. Además, muchos no usan elementos de protección, como cascos o prendas reflectivas para la noche.
Aunque parece que el Código Nacional de Tránsito no aborda estos vehículos, el artículo 94 establece normas para bicicletas, triciclos y motocicletas. Lamentablemente, muchas de estas normas son violadas por los ciclistas: no utilizan chalecos reflectivos, se apoyan en camiones en carreteras, transitan por andenes destinados a peatones, prefieren las vías para automóviles y desatienden señales de tránsito.
Para su propia seguridad, los ciclistas deberían usar cascos de seguridad, pero algunos los critican o los llevan solo en la mano. La imposición de comparendos por esta falta tuvo éxito temporal, pero hoy es extraño ver ciclistas con casco.
¿Se necesitará una mano dura para hacer cumplir las normas? Esto resulta difícil cuando el control del tránsito vehicular carece de personal suficiente o cuando las prioridades no se centran en esta problemática.
Quizás la solución más sensata sea retomar el tema de la cultura ciudadana, donde los ciudadanos tomen conciencia de las conductas que nos ponen en riesgo, tanto a nosotros como a los demás.
miércoles, 1 de abril de 2015
Es posible sobrevivir en una motocicleta
El desmedido aumento de motos ingresado a diario a las calles bogotanas - es muy fácil adquirir una moto -, la imprudencia de los motociclistas, la impericia de muchos, el exceso de confianza en la conducción, y en otros más, probablemente por la intolerancia de conductores de los automóviles y las mismas motos, cualquiera de estas causas puede estar complementada con el estado de las vías.
- Aprender a conducir y conocer la motocicleta: no da igual conducir una escúter (menos de 100 cc) a una moto de 1000 cc, el aumento en la potencia debe aumentarse el cuidado; el riesgo es mayor.
- Conducir a la defensiva: ir a una velocidad segura permite maniobrar más fácilmente.
- Guardar la distancia de seguridad y hacer que la guarden: en caso de necesidad se podrá maniobrar más fácil.
- Si puede evite conducir con lluvia, más aún si es intensa: la vía será más deslizante, la visibilidad disminuye.
- Asegurarse que lo vean: permanecer en los espejos de quien nos precede, usar materiales reflectivos y luces encendidas.
- Tener en cuenta; las calles no son pistas de carreras: Los motociclistas deberán recordar que los únicos sitios seguros para ir a tope en la velocidad con la potencia brindada por la moto, es el autódromo; se le han hecho zonas de escape, camas de arena para amortiguar las caídas en curvas. En las calles una curva mal tomada, una señal evitada, puede terminarse en una pared, otro vehículo, contra un peatón y el final puede ser fatal.
- El otro no puede suponer lo que va a realizar.
- Estar atento a las condiciones de la vía: en nuestra Bogotá no nos pueden garantizar vías para una conducción con confianza.
- Usar equipo el equipo de brinde la protección adecuada: casco, botas, guantes, protectores. No usarlos solo porque hay que cumplir una norma.
- Tener en cuenta las Normas de Comportamiento expresadas en el Código de Tránsito de Colombia, Titulo III, Titulo III, más allá de las amenazas consignadas en el Código; la vida vida no se puede recuperar, el dinero duele al instante en que se pone en las cuentas de la Secretaría de Movilidad, después es posible volverlo a tener.
Como complemento, las autoridades de movilidad deberían hacer algo más formativo para los motociclistas, que les permita una conducción segura, y endurecer las condiciones para la adquisición de una moto, o medidas que desestimulen el uso, conscientes de que no hemos podido brindar un movilidad adecuada en nuestras ciudades.
Para finalizar, en nuestras casas habrá alguien con la preocupación que el día termine bien - sano y salvo - independientemente del vehículo utilizado para salir o llegar a nuestros destinos.